sábado, 25 de octubre de 2008

¿Practican sexo las Dóminas con sus sumisos?

Este artículo fue escrito para contestar a una sumisa que preguntaba en un foro en el que participo, el porqué las Dóminas somos asexuadas, y si los Amos practican sexo con sus sumisas, por qué nosotras no lo hacemos con los sumisos. Incluso, se preguntaba si era por “feminismo”.
Naturalmente no pretendo sentar cátedra, ya que en este tema entramos en los deseos de cada cual, pero sí me gustaría al menos despejar dudas sobre esa casposa leyenda de que las Dóminas no practicamos sexo con los sumisos.
Iré por partes y sentaré de ante mano que sesiones se pueden tener con personas que sexualmente no nos motivan, pero con las que sin embargo podemos empatizar a través de este pacto que nos equilibra dentro del juego BDSM, y digo esto porque efectivamente, como profesional jamás pactaría una sesión con sexo a priori, ya que como mujer no soy distinta de otras, y para tener sexo con un hombre necesito desearlo, por lo que si pactara una sesión con sexo dejaría de estar haciendo BDSM para vender sexo duro, y no estoy interesada en dedicarme a la prostitución (conste, y quede claro que no es una critica a tal profesión). Es posible que de este hecho pueda derivarse parte de la fama de que las Dóminas no practican sexo con los sumisos, pero no tiene porque extrapolarse a nuestra vida particular, ni porque estar generalizado entre el resto de las Dóminas amateur.
Por otro lado, parece que lo que aquí estamos analizando es la diferencia entre lo que hacen los Dominantes y las Dóminas, y ahí creo que estareis todos de acuerdo en que hombres y mujeres no somos iguales, y por tanto al igual que la dominación masculina es distinta a la femenina, también lo es la sumisión de ambos géneros. Nuestras fantasías reflejan las frustraciones o sueños que nacen del imaginario de cada persona, y este imaginario se crea a partir de la cultura en la que nos hemos educado, la nuestra enraíza en la judeo-crisitana, en la que la mujer debe ser decente y para tal propósito conservase casta, pero sin embargo al hombre se le ha permitido “echar sus canitas al aire” porque por serlo, se le presupone más actividad sexual, y dada esta condición la idea de sometimiento del hombre hacia la mujer es puramente de utilizarla sexualmente a su antojo. Pensemos ahora en el matrimonio tradicional, a fin de cuentas no dejaba de ser un 24/7, eso sí, no consensuado, pero en el que el hombre era el amo y señor con derecho sobre la mujer, y ella la esclava sometida a él. Así el sexo quedaba por entero a la voluntad de él y para su disfrute cuando él lo deseaba, sin embargo una argucia muy común que desarrollaron las mujeres, fue la de negárselo cuando necesitaban conseguir algo o se sentían disgustadas, ya sabéis, el famoso dolor de cabeza… a grandes males, grandes remedios y a la mujer no le quedó otra salida más que la de ir refinando sus artes para poder escabullirse del sometimiento al que se vieron obligadas.
Después de este repaso histórico que a todos os sonará, no es raro que las fantasías de sometimiento de los hombres dominantes pasen por someter a la mujer sexualmente, las de las mujeres sumisas la de ser sometidas de este modo, y sin embargo los hombres sumisos cuanto más controlada sienten su sexualidad más complacientes y sumisos son, por lo que las Dóminas podemos valernos de la argucia que aprendimos de nuestras madres.
Pero no quiero acabar ahí, creo que hay algo más a tener en cuenta para explicarse esta fama que nos han echado, y me parece que es que muchas Dóminas pueden aún estar dejándose llevar por el machismo (como veis para mí no tiene esto nada que ver con el feminismo, sino todo lo contrario) que nos presupone más respetables cuanto más castas somos… aún se sigue criticando a la mujer que es muy activa sexualmente o que disfruta de cierta liberalidad, porque ser promiscua es algo deleznable, es decir, que lo que a los hombres se les a alabado durante siglos resulta que a nosotras se nos sigue negando, porque una mujer así suele ser “la chica divertida” pero no la respetable, ni la que se puede contemplar como pareja ideal… creedme aún está impregnado en nuestra cultura una sombra de aquello que tan bien criticó en el siglo XIX Benito Pérez Galdós en su novela “Fortunata y Jacinta”
Sin embargo, los tiempos van cambiado, algunos y algunas ya somos mentes libres, y como comentaron varios Amos al hilo del mismo tema del foro, ni todas las sesiones de dominación de los hombres son con sexo, ni es verdad que nosotras las Dóminas y Amas no utilicemos a nuestros sumisos sexualmente, al menos la que suscribe, en mi vida personal cuando decido jugar con un sumiso suele ser un hombre que me gusta y que me excita sexualmente, yo no soy de piedra y me parecería una tontería mayúscula quedarme con las ganas por preservar una reputación basada en una creencia machista y anticuada, si así fuera, entonces ¿dónde quedaría el cumplimiento de los deseos que como Dómina tengo? Es más, son pocos los casos, porque una de las condiciones indispensables para ser sumiso personal mío es no tener pareja, y la mayoría de los sumisos que me visitan profesionalmente la tienen, pero cuando en alguna ocasión me ha gustado alguno de ellos no le he vuelto a recibir profesionalmente, y precisamente por mi interés de utilizarle sexualmente le he citado personalmente para cumplir mi deseo.
De todos modos, no creo que la dominación femenina sea asexuada, de hecho y aunque no haya sexo en una sesión, lleva implícitos el erotismo y la seducción, el ideal del sumiso suele ser su necesidad por complacer a la mujer a la cual desea, que para él pasa por someterse a su voluntad.

6 comentarios:

  1. Desde la óptica de este sumiso, por supuesto que me encantaría tener sexo con la Domina, pero al pactar una sesión con una profesional del BDSM busco el juego DS que es lo que me motiva a llamarla, encuentro su presencia seductora y confió descargar mis genitales. Espero eyacular pues es una de las cosas por las que pago, pero alguien se ha ido alguna vez de una mazmorra profesional sin hacerlo, a no ser que haya pactado previamente su control sexual. Con el sexo lo que perseguimos de forma egoísta es el orgasmo, con una Domina profesional tengo garantizada mi eyaculación y que me corra es sexo.
    Probablemente las tradiciones hayan moldeado nuestra forma de tener sexo, sin embargo hay que ser muy cuadriculado para circunscribir el sexo exclusivamente al mete-saca o identificar prostitución con mujeres. El hombre dominante profesional debe entender, según esta concepción, que follarse o dar por culo a una mujer sumisa es el fin de una relación de poder, pos mu bien, pero esta relación esta bastante más cerca de la prostitución que la dominación femenina profesional o es directamente prostitución pues aquí si hay contacto sexual. No es reflejo de una sociedad machista acusar a las Dominas de prostitutas y no hacerlo con los varones.
    Pagar por obtener un servicio, es algo normal en la economía, porque ese empeño de algunas personas en dar un matiz peyorativo a cualquier actividad relacionada con la dominación. A mi una Domina profesional me posibilita experimentar en real una escena que solo en mis fantasías virtuales, vivo; me ayuda a profundizar en mi libido, me seduce sin necesidad de desnudarse, me ofrece comprensión, respeto y conocimiento; me enseña a liberarme de prejuicios...y tantos otros servicios que no me ofrece una prostituta. El sólo sexo no me compensa.
    Una relación DF es progresista en cuanto invierte los cánones establecidos por la moral judío-cristiana, es feminista en tanto que las mujeres pueden hacer lo que quieran o sientan con la única limitación de su autocensura y no por las connotaciones del macho, es libre, equiparando la aceptación social del varón polígamo con las mayores posibilidades biológicas de la mujer de mantener múltiples relaciones.
    Es para mi un privilegio que me permita emitir mi opinión en su blog.
    A sus pies
    limpiabotas-fran

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  2. Podría, dado el disgusto que me causa, no haber permitido la publicación de este comentario, pero me das la oportunidad de dejar claras las cosas, para aquellos que piensan que venir a verme es venir a correrse por el derecho de haber pagado.
    Dices, que cuándo no se corrió un sumiso en una sesión profesional… pues muchas fran, es más tú vienes a que te domine, no a que te permita correrte en mi presencia. Utilizo tu sexualidad (que no la mía, y por eso digo que no practico sexo profesionalmente) como un medio para hacerte vivir en tu dimensión sumisa, pero no como finalidad, si tú lo has percibido así, prefiero que no vengas nunca más a visitarme.
    Para mí tu tributo sirve para mantenerme en esta actividad y para poder recibirte en un lugar adecuado con todo lo que ello conlleva, pero no como pago para que tú te corras. Muchas veces precisamente el juego es ese, no permitirlo, e incluso no permitirlo hasta varios días después, y en muchísimos casos ni siquiera lo pretenden. Si tú haces lo que te viene en gana, que por supuesto puedes hacerlo… en realidad el que te pierdes la emoción de la sumisión eres tú. El que tiene cambiado el concepto y considera que la que hace un servicio soy yo, eres tú, así que sólo tú te pierdes la realidad con la que me ocupo de los sumisos que me visitan.
    Tan sólo has venido una vez a visitarme, y sin embargo dices considerarme tu Señora. Eso quizá sea por que yo me involucro, porque antes de venir, ya hace varios meses, intercambiamos no pocos correos, porque después has estado enfermo y me interesé por ti, porque luego has tenido dudas y las he atendido, porque después decides que no puedes vivir sin BDSM y vuelves a escribirme y vuelvo a atenderte y a darte mi permiso para regresar y arrodillarte como te dije en un rincón de mi mazmorra… has recibido dominación pero también consuelo de mí, y sin embargo cuentas, muy tristemente para mí, que pagas por venir a correrte… Sinceramente, reitero, no vuelvas.

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  3. Siento mi corazón roto al leeros, siento ser la causa de su disgusto.
    Avergonzado estoy de lo que escribí y puesto que habéis decidido publicarlo, me gustaría que también publicarais mi rectificación.
    Siento mi torpeza al extrapolar a una realidad (“...cuando no se corrió un sumiso en una sesión profesional...”) mi escaso bagaje de experiencias en sesiones con Dominas profesionales. En las pocas ocasiones a las que he asistido, siempre me he corrido o me han permitido eyacular, es cierto que todas han sido sesiones iniciaticas y a lo mejor por ser las primeras son distintas a las siguientes. No he repetido con ninguna Ama profesional porque con ninguna me he sentido acogido como con Ud. y como bien dice no he vuelto a tener ese honor por diferentes vicisitudes o dudas achacables a mi falta de determinación y carácter.
    Soy un sumiso autodidacta, que ha ido aprendiendo de sus sueños, de publicaciones eróticas y de Internet.... cada paso que daba ha ido acompañado previamente, de una pulsión sexual que provocaba una búsqueda y a posteriori, de una casi diaria masturbación que finiquitaba el episodio. Con esto quiero mostrarla que mi realidad sumisa ha ido siempre acompañada del sexo.
    Siento ahora, más que nunca la ausencia de alguna persona con la que comentar mis ideas sumisas, con la que debatir mis sensaciones, pero desgraciadamente me cuesta aceptar mis inclinaciones, vivo en un entorno social triunfalista donde la sumisión es tratada de forma peyorativa y esta ambientación me hizo buscar la ayuda en una Domina profesional. Para mi era una forma de educarme, aceptarme y vivir mi sumisión
    Efectivamente, yo voy a que me domine, pretendo que utilicé mi sexualidad como un medio para hacerme vivir mi dimensión sumisa, que reordene y reoriente mis confusas ideas. No permitirme ir a verla es para mi regresar a un oscuro horizonte donde este sexo en soledad, sí que no compensa; donde volver a reiniciar la búsqueda de una Domina que se involucre y por la que me sienta comprendido, un imposible.
    Gracias por indicarme el camino: Creo que he aprendido la lección, sé porque deseo verla, pago para que Ud. pueda mantenerse en esa actividad que tanto necesito, espero pueda perdonarme y me permita servirla en el lugar o rincón que considere oportuno.
    Permítame llamarla y compruebe la sinceridad de mi rectificación.
    A sus pies
    limpiabotas-fran

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  4. Cuando se desconoce algo, no se deben aventurar juicios sin ton ni son, porque cada uno piensa y siente de una manera distinta, y en este saco somos todos muy diversos.
    Evidentemente, yo sólo hablo por lo que siento yo, no puedo hablar por el resto de las Dóminas profesionales, así que en este artículo lo que trataba era de dar mi visión más personal.
    Efectivamente, las fantasías se reflejan en la sexualidad, pero obviamente como profesional no puedo darle a eso más que un sentido, que es la utilización de la sexualidad del sumiso como medio para trasportarlo allí a donde se siente sumiso, así que me molesta mucho que alguen me guarde tan sólo en su faceta más sexual, cuando lo que hago es tratar fundamentalmente con su psiquis...
    De momento por responsabilidad, no podría darte una sesión, estoy enfadada, y la ira es la peor compañía de un Dominante.
    Saludos. Dómina Libertad

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  5. Está claro que hay que conocer de lo que se habla ,como y por qué.
    Me dedico a este mundo de forma profesional desde hace años y casi siempre ocurre lo mismo.Confunden a los profesionales del sexo con chaperos,que no tengo nada en contra de ellos y les respeto.
    Nadie, por el solo hecho de pagar tiene derechos a nada.Así es y así se trata.Los derechos los otorgamos los Amos/as y punto.El placer buscado va más allá de un simple orgasmo o eyaculación meramente sexual.Hablamos de un plano mucho más elevado, que sobrepasa con mucho el estado físico y mental,para llegar al alma de nuestro/a esclavo/a, tomando todo esto connotaciones de lo espiritual.Es el placer más absoluto que reside en el interior del cuerpo,mente y alma de cualquiera que lo tenga,que no , y lo que hacemos con este nuestro buen hacer, es guiaros hasta ese lugar atemporal y casi mágico,de los sentidos subliminados a un estado casi sobrenatural.
    Si quieres sexo, ya sabes lo que has de hacer.
    Gracias Dómina Libertad.

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  6. Hola Castigador40
    ...Y luego dicen algunos que no sentimos, y sin embargo qué poco saben por muy BDSMeros que se sientan... digo yo que aquellos que nos critican desde su ámbito amateur, cosa que nosotros sí conocemos, deberían probar alguna vez a hacerlo profesionalmente, se siente, claro que se siente y mucho, y veo que a tí te pasa igual que a mí, por lo mucho que me identifico con lo que dices sobre "ese estado casi sobre natural"... si eres capaz de decirlo como tú lo has dicho... ¿quien puede dudar de que lo sientas?
    Gracias por tu visita... seguiré tu pista.
    Un abrazo. Dómina Libertad

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